Ahora que me levanto del suelo (un pequeño ataque de risa), me siento ya capacitado para escribir esta entrada, Que conste que es a petición del presidente del SIPA, que promueve el turismo en Aragón, parece que más que la DGA.
Resulta que si no tenemos turismo es porque lo hacemos mal. No es porque se nos niegue todo tipo de permisos o facilidades para darnos a conocer, no. Un caso concreto: poner un cartel indicador en una carretera nacional. Como es nacional, hay que llamar a Fomento, que te pone todas las trabas posibles para decirte que no vas a poder poner ningún cartel en su carretera.
A continuación transcribo mi conversación con un señor de Fomento de Huesca:
– Hola, querría saber lo que tengo que hacer para poner un cartel anunciador de mi negocio en la carretera
– Pues es que no se puede poner nada de negocio particular a menos de 30 metros de la carretera, porque no está permitido, incluso si compras o alquilas un campo cercano y pones un cartel propio, te multamos. Si pones un cartel homologado en la carretera, te multamos. Es que distrae al conductor.
– Pero, ¿por qué salen anunciados otros negocios privados en las carreteras?
– ¿Otros? ¿Cuáles?
– Las pistas de esquí, y bien grandes
– Es que eso es un convenio (me dijo el nombre y todo sin pensar) con la DGA porque las pistas son de interés turístico
Ahí está. Lo único de interés turístico para el Gobierno de Aramón uy! perdón, de Aragón, son las pistas de esquí. Algún cartelito más nos pone en las carreteras, como el de San Juan de Plan y el de Ordesa, pero todo lo demás se la suda y bastante.
Por cierto, además de decirnos (Fomento) que no pusiéramos carteles de ningún tipo en su carretera nacional, nos dijo que podíamos probar a pedir permiso por escrito (s.XXI), pero que independientemente de que no nos aceptarán poner carteles, eso cuesta 60 euracos.
Así promociona DGA y sus poíticos el turismo que no sea de sus amigotes o del que no puedan sacar tajada alguno de ellos revendiendo terrenos o especulando. Vamos, que aquí es como siempre, si no tienes un amigo o familiar cercano político de turno en activo, no te comes un rosco. Las normas de tráfico están para los de la calle, no para otros. Se inventan «convenios» para que unos puedan quebrantar las normas mientras que los demás no tenemos que conformar «cumpliendo las leyes». Esto es a mayor nivel, pero se ve en todas las facetas de cualquier político de este país. Sin ir más lejos el otro día se celebró el descenso popular del Cinca, previo a las Navatas, tan famosas, en esa escollera – depósito de áridos que es el Cinca (antes era un río en el que se navegaba en rafting y piragua). La empresa que destroza el río paga de vez en cuando alguna multilla y sigue jodiendo el río. Los que lo usan para comer (con el rafting) como no tienen pasta ni amigos políticos, no se comen un torrao.
Decía, que habían invitado a una consejera de turismo para que se uniera al descenso popular del Cinca, y que así viera el potencial de este río (el potencial que tenía antes de que lo destrozaran) en cuanto a turismo activo. Pues va la colega y se trae a dos amigas para que bajen por la cara también, oye, que soy política. Con un par. Cada uno a su nivel (como el mundial, que van a ir 20 directivos de TVE por la cara), pues eso, que los de la calle nos tenemos que joder en pedir/pagar permisos, licencias, contratos, resguardos, proyectos… mientras que el amigo/familiar o el mismo político tiene manga ancha.
Que no me digan que no usamos los canales adecuados que me descojono.
Luego pondré otra «anecdota»· con la CHE que también es muy divertida.
Tienes la opción de alquilar la parte inferior de las vallas que tienen instaladas «Vértigo» o » El jabalí blanco».