Pico Palas

Dejamos momentáneamente el Pirineo Calizo para reencontrarnos con los granitos que forman crestas interminables y contrafuertes espectaculares. En este caso ascendemos al Palas, pico fronterizo de no fácil ascensión. Día de niebla, viento y sol, como recordando algo. El Palas parece infranqueable en cualquiera de sus vertientes, rodeado de crestas y contrafuertes que lo protegen, pero, invisible y escondida está la chimenea Ledormeur, ruta normal de ascenso a este estupendo pico alejado de los «tresmilistas», ya que por unos pocos metros no alcanza esta altitud. A pesar de no poseer este título, es un digno rival y sus vistas, incomparables. Es un pico fronterizo y una pirámide casi perfecta desde los ibones de Arriel. Desde la Sarra (en Sallent de Gállego) tomamos el sendero que sube a Respomuso. A una hora tomamos el desvío a los Ibones de Arriel bien señalizado. Ascendemos una pedrera para alcanzar el ibón inferior. Seguimos al superior y la subida es evidente por canchales y pedreras que nos llevan a la base del Palas. Luego se busca el acceso a la chimenea (ahora muy bien marcado, parece ser que «gracias» a un accidente) y trepando fácilmente llegamos a la arista amplia que nos lleva a la cumbre.